La meditación o meditaciones y los ejercicios conscientes son herramientas poderosas para gestionar el estrés y las emociones negativas. Aquí te compartimos algunas prácticas sencillas que puedes incorporar en este día (o cualquier otro). Cualquier día es una oportunidad perfecta para practicar mindfulness y cultivar la calma interior.
1. Meditación de 5 minutos para empezar el día con claridad
- Encuentra un lugar tranquilo donde puedas sentarte cómodamente.
- Cierra los ojos y toma cinco respiraciones profundas, inhalando por la nariz y exhalando por la boca.
- Enfócate en tu respiración. Si tu mente se distrae, simplemente regresa a la sensación del aire entrando y saliendo.
- Dedica unos momentos a visualizar cómo quieres sentirte durante el día: de una manera calmada, positiva y llena de energía.
Tal como se publicó en un estudio en JAMA Internal Medicine, la meditación de atención plena puede mejorar el bienestar mental y reducir los niveles de estrés (Goyal et al.,2014)
2. Respiración consciente para momentos de estrés
Si te sientes desbordado/a o abrumado/a, prueba este ejercicio:
- Inhala profundamente durante cuatro segundos.
- Retén la respiración durante cuatro segundos.
- Exhala lentamente durante seis segundos.
Repite de tres a cinco veces hasta que sientas una mayor sensación de calma.
Este ejercicio de respiración está respaldado por investigaciones que muestran cómo técnicas de respiración controlada pueden activar el sistema nervioso parasimpático, ayudando a reducir el estrés y la ansiedad (Frontiers in Psychology, 2017).
3. Visualización positiva para transformar emociones negativas
- Si te sientes atrapado en pensamientos negativos, dedica unos minutos a imaginar un lugar que te haga sentir feliz y seguro (una playa, un bosque, tu hogar).
- Visualiza los detalles: los colores, los sonidos, las texturas y los aromas.
- Permite que esta imagen te envuelva y te ayude a soltar cualquier tensión o preocupación.
Tal como se publicó en el Journnal of Behavioral Medicine, las técnicas de visualización pueden reducir significativamente el estrés y promover una mentalidad más positiva (Vargas et al., 2019)
4. Integración en tu día a día
Para aprovechar al máximo estas prácticas, considera programar momentos específicos durante el día para realizar alguna de ellas. Por ejemplo, al despertar, antes de almorzar o justo antes de dormir.
Estas pausas conscientes no solo ayudan a mantener la calma, sino que también fortalecen la resiliencia emocional con el tiempo.
5. Conclusión
Como decíamos en el Blog “¿Quieres Transformar el Blue Monday en el Día Más Positivo del Año?” también depende de ti hacer que sea el día más positivo del año en el que puedas mantener alejada a la tristeza.
Piensa que hay fechas y días tristes, como el Blue Monday pero esos días pueden transformarse en una oportunidad para cuidar de tu mente y cuerpo. Practicar meditaciones y ejercicios conscientes es algo que está respaldado por investigaciones científicas, no es baladí, te ayudarán a navegar el día con más tranquilidad y a cultivar una actitud positiva que te acompañe en el resto de tu semana.
¡Recuerda que la práctica constante es clave para obtener beneficios duraderos en tu bienestar emocional!